La primavera nos ha devuelto la lluvia, así que vigila cuando conduzcas. El aquaplaning o acuaplanin es el fenómeno que se produce cuando la presencia de agua en la carretera provoca que el vehículo pierda por completo la adherencia o tracción. Los neumáticos, que se revisan siempre en las inspecciones ITV, no pueden entonces drenar todo el líquido y nos encontramos con una situación muy peligrosa. ¿Qué debemos hacer?
El concepto del aquaplaning nació en 1960 de la mano de una de las mentes pensantes de Dunlop, Tom Frech. Cuando llueve sube el riesgo de accidentes y el aquaplaning es uno de los motivos. Por eso, primero te explicaremos qué debes hacer si te topas con uno. La reacción natural puede ser frenar a fondo o mover el volante, pero hay que hacer todo lo contrario: agarra el volante con firmeza, no pulses ningún pedal y prepárate para cuando el vehículo recupere la adherencia. De lo contrario puedes encontrarte que al volver a tener tracción las ruedas te dirigen en la dirección equivocada, con riesgo evidente de accidente.
Lo mejor siempre es la prevención y por eso te ofrecemos 3 consejos:
1– Revisa periódicamente el estado de los neumáticos. El grosor del dibujo siempre debe superar los 1,6 milímetros por seguridad. Una moneda de euro es un buen recurso para medirlo. Los neumáticos son una pieza clave en la conducción y por eso se revisan en la inspección ITV. También es recomendable controlar la presión, ya que demasiada o demasiado poca también puede influir en las opciones de sufrir un aquaplaning.
2– Modera la velocidad si llueve. El dibujo del neumático drena el agua, pero cuanto más aceleres más le costará. Tal y como indica la DGT, a 60 km/h y con suelo húmedo se pierde un 20% de la adherencia, pero con lluvia constante la cifra asciende al 50%. Si decidimos pese a todo pisar el acelerador y superar los 100 km/h puedes llegar a perder entre el 60% y el 90% de tracción.
3– Selecciona bien la ruta. Las carreteras irregulares o en mal estado favorecen la aparición de grandes charcos de agua. Y en función del tráfico que sufran puede favorecer la presencia de manchas de aceite o de combustible, que afectarán a la adherencia de los vehículos en la carretera cuando llueva.
Por lo tanto, recuerda que si a pesar de apostar por la prevención vives un aquaplaning no debes ponerte nervioso, sino coger el volante con firmeza, mantener la dirección y no pisar ni el freno ni el acelerador hasta que notes que vuelves a tener tracción en las ruedas. En este proceso los neumáticos tienen un rol esencial, así que debes revisarlos cada cierto tiempo y sustituirlos cuando el dibujo mida menos de 1,6 milímetros. En la ITV comprobarán en qué estado se encuentran para decidir si superas o no la inspección. Recuerda que si ha llegado la fecha en la que tu vehículo debe pasar la ITV puedes ponerte en contacto con cualquiera de las estaciones PrevenControl por teléfono o a través de nuestra web.
